Los fotógrafos, en cualquiera de las modalidades de la fotografía, buscan plasmar una realidad tridimensional en un medio bidimensional. Para lograr esta tridimensionalidad en nuestras imágenes tenemos una serie de claves visuales que hacen que nuestras fotos generen representaciones tridimensionales. Así, nuestros espectadores lo podrán percibir.
Herramientas para trabajar con la tridimensionalidad
Entre estas claves visuales se encuentra el tamaño de los objetos o sujetos en nuestras fotografías. Dos o más formas similares creará la sensación que la figura más pequeña está más distante que la de mayor tamaño. Tomemos como ejemplo un grupo de pelícanos en una playa. Mientras más pequeña la figura nuestro cerebro la ubicara más lejana del primer plano. Esto nos brindará profundidad en la imagen.
Veamos el caso de tener elementos que se superponen. Si tenemos unos elementos tapando a otros, logramos conseguir sensación de distancia. Nuestro cerebro percibe al elemento que tapa al otro más cercano, brindando varios planos en la imagen.
Otra clave visual que tenemos a nuestra disposición es la perspectiva atmosférica. En estas imágenes podemos ver varios elementos y algunos se pueden ver más borrosos que otros. Incluso, algo indefinidos y menos contrastados, por lo que los vamos a percibir más lejanos.
Como hablamos de la perspectiva atmosférica podemos hablar de la perspectiva lineal. En este caso, podemos “ver” converger dos líneas verticales. El lugar de la convergencia lo vamos a percibir como más distante. Esto lo podemos observar cuando fotografiamos un camino recto donde a ambos lados está sembrado de árboles.
La Psicología Gestalt
Para complementar esta información de las claves visuales es importante conocer cómo trabaja nuestro cerebro en este sentido. Para esto, la psicología Gestalt nos brinda algunas explicaciones en sus leyes de proximidad y de cierre. Cuando la Gestalt habla de la proximidad se refiere a la agrupación de elementos en función a la distancia que los separa. En el caso de la ley de cierre esta nos indica que nuestra mente tiende a completar formas y figuras inacabadas.
Este es un tema de suma importancia para nuestra fotografía. Debemos tenerlo en cuenta al momento de componer nuestras imágenes.