¡Los “pajareros” y amantes de las aves en Puerto Rico estamos de fiesta! La Sociedad Estadounidense de Ornitología (AOS por sus siglas en inglés), acaba de declarar al Jilguero como ave endémica de Puerto Rico. El Jilguero se incluyó en el suplemento #64 de la lista de verificación de aves de América del Norte de la mencionada Sociedad. El nuevo nombre científico del Jilguero de Puerto Rico es «Chlorophonia sclateri”. También, es conoce con el nombre de Canario del País y Eufonia. Podemos encontrarlo en bosques húmedos, secos, bosques secundarios, cafetales que están bajo sombra y en franjas de bosque en áreas urbanas. Mide entre 10-12 centímetros. Puede llegar a pesar entre 13-16 gramos.
Descripción del Jilguero
El macho tiene la garganta, pecho, vientre, flancos y espalda baja de color amarillo brillante. La frente anaranjada y la cabeza azul turquesa. Mientras que la espalda, mejillas, alas y cola son de color azul añil o negro. Por otra parte, el pico es corto y negro y sus patas son grises.

La hembra, por su parte, tiene la espalda y mejillas verde oliva, la garganta, pecho, frente y flancos son amarillentos. La cabeza es azul pálido y la frente y espalda baja amarillas. El Jilguero se alimenta principalmente de bayas pequeñas silvestres. Entre éstas, la Yerba Capitana, el Muérdago, y el Capulín. Esta ave por su belleza y canto melodioso era enjaulada y vendida. Gracias a que actualmente existe una ley que protege a todas las aves nativas y prohíbe tenerlas en cautiverio, esta práctica se ha reducido.

Reproducción
El Jilguero se reproduce de enero a julio. La hembra pone de tres a cuatro huevos blancos con pequeñas pintas pardas. Construye su nido en forma de domo entre bromelias. También, utilizan como camuflaje para su nido los líquenes.

Según información de AOS, la lista de verificación se ha publicado desde 1886. El Comité de Clasificación de América del Norte (NACC) de la AOS la actuliza anualmente. Esta es la autoridad oficial sobre los nombres y la clasificación de las aves de la región. La lista es consultada por observadores de aves, así como, por ornitólogos profesionales.
Agradecemos a Luis Ángel Rivera por facilitarnos las fotos que acompañan este artículo.