La aproximación a la fotografía de vegetación, aunque parezca fácil, tiene sus complicaciones. Al momento de fotografiar vegetación debemos seleccionar al mejor sujeto disponible. No solo por su apariencia que debe ser óptima, sino por su ubicación. Un espécimen que se pueda aislar del resto. Donde podamos tener una posición en la que el fondo quede alejado y libre de distracciones. Debido a que es igual de importante que el sujeto en sí.
Dedicar tiempo a buscar el espécimen que se encuentre en el mejor estado posible es muy importante. Por esta razón, no debemos centrarnos solo en el primer sujeto que veamos. Tenemos que darnos tiempo de observar por los alrededores. Por si hay alguna otra opción. Esta búsqueda debemos realizarla con mucho cuidado. Para así impactar negativamente el área lo menos posible. Una vez encontrada la joya de la corona, vamos a visualizar varias ubicaciones. Así conseguiremos la toma que más nos agrade.
La fotografía se trata de tomar decisiones. Entre las decisiones que tendremos que tomar, al momento de fotografiar vegetación, es si vamos a retratar un sujeto o un grupo. Tiende a ser más complicado conseguir un grupo impecable que un sujeto. Por tanto, si lo encontramos debemos preferirlo al sujeto.
En el caso que seleccionemos un espécimen, no significa que no podamos incluir al grupo o parte de él en la toma. En este caso, lo que podemos hacer es centrar la atención sobre el sujeto dejando en segundo plano al grupo. Del mismo modo, tenemos la opción de tener al sujeto enfocado y ubicar en la composición otros sujetos del grupo bastantes desenfocados.
La ubicación al momento de fotografiar vegetación
Como señalamos antes, otro asunto es la ubicación del sujeto. Si este está cerca de un fondo que nos gusta tenemos la opción de solo desenfocar un poco. Pero, que se logre definir lo que hay. O, por el contrario, dejamos todo enfocado. Si el sujeto se encuentra retirado del fondo tenemos la opción de dejarlo todo desenfocado. Así brindamos mayor atención al sujeto.
Otra decisión que tomaremos, al momento de realizar nuestra toma fotográfica, es cuánto detalle deseamos mostrar de nuestro sujeto. Podemos incluir al sujeto en su medio ambiente, creando una toma donde el entorno del espécimen sea incluido. Así como, dejar solo a nuestro sujeto, mostrando un plano completo donde se puede contemplar toda su forma.
También podemos utilizar la aproximación. De esta manera, presentaremos un conjunto de detalles del sujeto, o extracciones de la planta. Otro podría ser, llegar al macro o por encima del tamaño real. En el caso del macro, buscaremos algún detalle del sujeto para presentarlo en su tamaño real 1:1. Por ejemplo, flor, hoja, fruto o semilla.
Si deseáramos comercializar este tipo de fotografías un uso que se les puede dar es científico o educativo. Un conjunto de fotografías, de todas las escalas y de diversas partes del sujeto, nos ayudará a tener mayores posibilidades de éxito.